Centrales hidroeléctricas del Bajo Caroní

En el 2006, a través del Decreto 4.412 publicado en la Gaceta Oficial N° 38.417, se cambió el nombre de las centrales hidroeléctricas por el de los próceres de la independencia venezolana, a tono con la política del ex presidente Hugo Chávez de rebautizar las obras del país con nombres alusivos a periodos presidenciales previos.

Especialistas eléctricos estiman que Guri, Caruachi y Macagua proveen más del 60% de la energía que consume Venezuela. En las últimas semanas, la atención se concentra en esta parte del país, pues la sobreexplotación del embalse de Guri, aseguran los expertos, ha generado un descenso vertiginoso que amenaza con la paralización de al menos ocho turbinas de la casa de máquina II de Guri, en caso de que llegue a la cota 240 metros sobre el nivel del mar.

El descenso del embalse de Guri y la proximidad con la cota mínima operativa, han motivado al Ejecutivo a decretar miércoles, jueves y viernes no laborables para la administración pública, a elevar el horario de autogeneración de grandes consumidores a nueve horas, a dragar el embalse, entre otras medidas, que no han frenado el declive.

Pese a que en los embalses se han registrado ciclos desfavorables en 2003 y 2010, los especialistas señalan que éste es el más intenso. Entre 2008 y 2015, se estima una inversión de 32.8 millardos de dólares en las centrales y, según un informe confidencial reseñado por El Nacional, el Gobierno nacional contrató 16.354 megavatios (MW) y solo incorporó al sistema 3.044 MW. C