Gaby Arellano

En febrero de 2014, en el marco de las protestas que se desarrollaron en 18 ciudades del país contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro, Arellano fue frecuente crítica del Mandatario diciendo que “si quiere dialogar, pare la represión”. Es cercana al partido político Voluntad Popular, organización que es denunciada por el chavismo de “fascista”. Desde entonces, es blanco de acusaciones.

En abril de 2014, luego del secuestro de la periodista y amiga de ella, Nairobi Pinto, Arellano fue citada por el Ministerio Público en calidad de testigo. Del mismo modo, en junio de ese año, fue acusada por el Gobierno Nacional de estar involucrada en presuntos planes de magnicidio, razón por la cual compareció ante el Sebin.

A su salida, acompañada de varios dirigentes de la tolda política, denunció que no dejaron entrar a su abogado en el interrogatorio. En noviembre de 2014, luego de seis años sin que se efectuaran elecciones estudiantiles en la Universidad de Los Andes, y con el apoyo de Voluntad Popular, Gaby Arellano se postuló a la Presidencia de la Federación de Centros Universitarios de esa casa de estudio sin embargo, según nota de Últimas Noticias, el ganador fue su contendor Jorge Arellano. El día de las votaciones, el presidente de la Comisión Electoral de la universidad, denunció que grupos encapuchados ingresaron a la institución con armas de fuego y quemaron parte del material.

El 7 de marzo de 2016 dio a conocer, como representante del partido Voluntad Popular, la consignación de un documento en el Consejo Nacional Electoral (CNE) que pide un aumento de máquinas para incrementar la capacidad de activistas y electores.

El 15 de mayo de 2017 difundió un video por su cuenta oficial de Twitter en el que dio a conocer que su casa situada en el estado Táchira estaba siendo rodeada por colectivos armados. Responsabilizó al gobernador del estado, José Vielma Mora, por lo que pudiera ocurrirle a sus familiares.

El 17 de junio de 2019 Arellano pidió a Voluntad Popular (VP) aclarar la presunta malversación de fondos en Colombia y sancionar a los culpables. Por otra parte, afirmó no tener vinculación alguna con Rossana Barrera y Kevin Rojas. “No tengo ningún tipo de responsabilidad ni con la organización ni con la administración del concierto que se dio en la ciudad de Cúcuta el día 22 de febrero” explicó.