Tarasazeh Tabriz

Infraestructura

Empresa registrada en Teherán, capital de la República Islámica de Irán. Su página web indica su especialidad en la instalación de edificios modernos con estructuras metálicas ligeras, con más de 13 años de experiencia. Fue contratada por el Estado venezolano, a través de la Corporación de Industrias Intermedias de Venezuela S. A. (Corpivensa) –adscrita al Ministerio de Industrias-, para la construcción de tres plantas de producción de estructuras metálicas para unidades habitacionales, en Cabimas (estado Zulia), Tinaquillo (estado Cojedes) yTemblador (estado Monagas). Al respecto, la Contraloría General de la República reportó en 2014 los incumplimientos de esta compañía en la producción de 8.544 kits de viviendas que debían ser entregados en septiembre de 2013. Reportajes periodísticos además demostraron triangulación tecnológica en sus trabajos en el país. En 2016 fue nuevamente contratada por el Estado mediante alianzas comerciales con el Ministerio de Turismo. (Ver Perfil)

Perfil

El 11 de mayo de 2016 el diario gubernamental Iran Daily, de idioma inglés, publicó que la República Islámica de Irán ayudaría a construir un aeropuerto y un complejo turístico en dos islas de Venezuela, contratos que no representan mayor novedad desde que el chavismo llegó al poder y posicionó a los persas entre sus principales aliados internacionales. Fábricas de carros, bicicletas, cemento, tractores, viviendas, destacan entre los acuerdos binacionales. “El cielo es el límite” cuando se trata de las relaciones entre Irán y Venezuela, dijo el vicepresidente iraní, Es’haq Jahangiri, en abril en una reunión con el vicepresidente venezolano del Área Económica y ministro de Industria y Comercio, Miguel Pérez Abad. El artículo de Iran Daily podía, entonces, pasar desapercibido entre los diversos anuncios de nuevas obras y convenios que promete el Gobierno nacional, si no mencionara una empresa cuestionada dos años antes por la Contraloría General de la República.

Tarasazeh Tabriz está registrada en Teherán, capital de la República Islámica de Irán. Su página web (consultada en 2016, mayo, 21) indica su especialidad en la instalación de edificios modernos con estructuras metálicas ligeras, con más de 13 años de experiencia. La sección de “Proyectos” del portal digital no menciona a Venezuela, mas el país caribeño sí aparece en la sección de “Noticias” en un artículo sobre la construcción de tres plantas de producción de estructuras metálicas para unidades habitacionales –es decir, para fabricar kits de viviendas-, una en Cabimas (estado Zulia), otra en Tinaquillo (estado Cojedes) y la tercera en Temblador (estado Monagas). A esto se le llama Sistema de Construcción de Matrices Livianas de Acero Frío y Laminados “LSF”.

El contrato fue suscrito por la Corporación de Industrias Intermedias de Venezuela S. A. (Corpivensa) –adscrita al Ministerio de Industrias-, por un monto de 14,1 millones de dólares, en el marco del convenio binacional Venezuela-Irán, y estipulaba transferencia tecnológica, planos de construcción, cálculo estructural, planos de galpones y planos de arquitectura. “De la fábrica sale el kit completo de acero galvanizado para viviendas de 80 metros cuadrados”, explicó en 2012 el entonces ministro de Industrias, Ricardo Menéndez. De ese proyecto, sin embargo, Tarasazeh Tabriz no salió bien parada.

DISPUTA CON SUBCONTRATISTA

La primera alerta la dio el abogado Tony Tovar, representante legal de una compañía canadiense, en un reportaje publicado en el diario El Universal por el periodista Joseph Poliszuk, en septiembre de 2013. Tovar expuso ante la prensa la disputa legal entre Tarasazeh Tabriz y su representada, a la cual la primera subcontrató en febrero de 2012, por 3,5 millones de dólares, para el suministro de los equipos para las tres plantas LSF a instalar en Venezuela. La empresa canadiense recibió 80% del pago -2,8 millones de dólares- ese mismo año, a través del Banco de Desarrollo Económico y Social de Venezuela (Bandes), de parte de Corpivensa, responsable del proyecto junto a Tarasazeh Tabriz.

El desacuerdo comenzó cuando la empresa iraní decidió rescindir el contrato con la canadiense y solicitó la devolución del pago, lo cual fue rechazado por la subcontratista que alegaba tener listos los equipos que diseñó específicamente para el proyecto de las plantas venezolanas. Tarasazeh Tabriz, entonces, demandó a la empresa y en mayo de 2012 el Tribunal Supremo de Justicia aceptó la querella en contra del presidente de aquella compañía, sobre quien el juez Irving Molina Flores –encargado del caso, sobrino de la primera dama Cilia Flores– ordenó el congelamiento de cuentas y propiedades, así como prohibición de salida del país.

Tovar aseguró la intención de la empresa canadiense de concluir el contrato: pidió que el Estado recibiera sus máquinas. Y sumó otra denuncia: “La empresa Tarasazeh Tabriz ha podido haber incurrido en serias y graves irregularidades en contra del Estado venezolano; por cuanto las líneas de producción LSF finalmente entregadas por dicha empresa a Corpivensa, no reúnen las características tecnológicas y de capacidad de producción que les fueron contratadas”, dijo a El Universal, en referencia a los equipos que la contratista iraní adquirió de otra empresa para las plantas.

Dos semanas después, El Universal publicó otra entrevista sobre el tema, con la voz de Hamid Fazel, representante de Tarasazeh Tabriz: «A mí me estafaron (…) El dinero que debían transferirme a Irán se lo quedaron y no lo devolvieron”. La versión iraní expuso un acuerdo de “repatriación de capital”: el pago de 2,8 millones de dólares depositados a la empresa canadiense habría consistido en una labor de intermediación con destino a Teherán, una práctica que calificó de común con compañías que cobran comisiones para redirigir dinero a la República Islámica. «No se puede enviar ningún dólar directamente a Irán desde que está bajo el bloqueo de Estados Unidos», dijo al sentenciar el tema como un asunto de triangulación de capital, y no de triangulación tecnológica. Fazel afirmó que los equipos para las plantas son iraníes, y que llegaron a Venezuela luego de escalas en Turquía, Alemania e incluso Estados Unidos. Un reportaje publicado en el portal Armando.info en 2015 desmintió esta ruta y la procedencia iraní de las máquinas.

INCUMPLIMIENTO

El informe de 2014 de la Contraloría General de la República (CGR) hizo un llamado de atención sobre el proyecto: reportó la ausencia de “documento referido a la ingeniería de detalle, planos de cálculos estructurales, detalle de despiece de máquinas, catálogos y manuales de operación, instalación y mantenimiento de las máquinas en las plantas, de acuerdo con lo establecido en la cláusula contractual correspondiente”.

El órgano contralor también determinó falta de control sobre la entrega y recepción de las máquinas para las tres plantas. Un reportaje del portal Armando.info develó que Tarasazeh Tabriz compró maquinarias y piezas metálicas para viviendas a una compañía canadiense, distinta a la primera, para ser enviadas a Venezuela, pagadas por Corpivensa. “Los equipos fueron transportados, según facturas de embarque, por vía marítima desde Toronto (Ontario, Canadá), a pesar de que la empresa iraní pidió en mayo de 2012 un anticipo de 20 por ciento del contrato por el alegado traslado aéreo de la mercancía. En total, fueron tres envíos, con dos contenedores cada uno, desde Canadá hacia Venezuela”, expone el reportaje publicado por Cristina González -redactora en Poderopedia Venezuela-.

La CGR reportó que de los 8.544 kits de viviendas que debían estar listos para el 30 de septiembre de 2013 entre las tres fábricas, sólo se había producido 2,1% de la meta con 180 kits. “No se cumplió con las fechas programadas para el suministro, instalación y puesta en marcha de la línea LSF en la planta ‘Los Cabimos’ y de las otras 2 plantas, ‘Tinaquillo’ y ‘Leonarda Rivas’, no se generaron actas de control perceptivo al momento de recibir los equipos, ni se definieron hitos de control para el seguimiento de la ejecución física de la instalación de las líneas de producción”, señala el informe.

Otro portal digital, Runrun.es, publicó un trabajo del periodista Roberto Deniz que revela que el gobierno inauguró dos veces una misma planta: la fábrica de Monagas, bautizada como Leonarda Rivas, fue inaugurada por el ministro Menéndez en septiembre de 2012, y luego otra vez en junio de 2014 por el ministro José David Cabello. 

El desarrollo irregular de sus obras no parece haber obstaculizado el crecimiento de Tarasazeh Tabriz en el país: en septiembre de 2014 Hamid Fazel visitó Tejerías, en el estado Aragua, con el apoyo del Ministerio de Industrias de Irán, la Embajada de Irán en Venezuela y el Ministerio de Vivienda de Venezuela, para llevar su evangelio de casas con estructura LSF ante el alcalde del municipio Santos Michelena, Alcides Martínez Peña.

“Son viviendas bonitas, de alta calidad, a prueba de terremotos. En los últimos años, países desarrollados como: Estados Unidos y Canadá, han utilizado esta forma de construcción para erigir sus viviendas. Venezuela es el único país de Latinoamérica que tiene 3 fábricas de LSF y además son las más completas a nivel mundial”, dijo Fazel, quien anunció que, de aprobarse el proyecto, podrían construirse 3 mil viviendas en año y medio en aquella zona aragüeña.

PROYECTOS TURÍSTICOS

El 6 de mayo de 2016 el presidente Nicolás Maduro encabezó un acto en el salón Bicentenario del hotel Venetur Margarita, junto al gobernador de Nueva Esparta, Carlos Mata Figueroa, la ministra de Turismo, Marleny Contreras –esposa de una de las cabezas del partido de gobierno, Diosdado Cabello-, el ministro de Petróleo y Minería, Eulogio Del Pino, y el ministro de Alimentación, Rodolfo Marco Torres, para anunciar alianzas con empresas nacionales e internacionales de cara a potenciar el turismo en el país.

El plan contempla tres áreas de inversión: desarrollo y culminación de proyectos hoteleros, rehabilitación de la red Venetur y operaciones vinculadas al tema gastronómico. Para la primera área, la ministra Marleny Contreras anunció una inversión por 132 millones de dólares y firmó varias alianzas comerciales, entre ellas una con Tarasazeh Tabriz para el desarrollo hotelero en la isla Aves de Sotavento, de acuerdo con una nota de prensa de la Gobernación de Nueva Esparta.

Foto: Prensa Mintur

No tardaron en comenzar: el diario La Verdad, del estado Vargas, reportó el 20 de mayo la desaparición de dos lancheros -Edgar Velásquez, de 37 años, y Gregory Gómez, de 18- que salieron el 14 de mayo desde el archipiélago Las Aves, donde estaban haciendo un trabajo para Tarasazeh Tabriz, hacia Los Roques, y no se supo más de ellos. Ante la falta de recursos de Guardacostas de La Guaira y Puerto Cabello, los familiares pidieron apoyo a la autoridad única del territorio insular, Gilberto Pinto, así como al empleador Hamid Fazel, para una búsqueda aérea.

La ministra y el presidente omitieron en sus declaraciones el otro alcance de Tarasazeh Tabriz en los planes turísticos –la construcción del aeropuerto-, anunciado al mundo por la prensa oficial de Irán. La ministra, sin embargo, ese mismo mes, a través de la red social Twitter, informó sobre más conversaciones de estrategias turísticas en el marco de aquella relación binacional donde “el cielo es el límite”.

Datos Básicos

Tipo de Organizacion:
Empresa Privada
Razón Social:
Tarasazeh Tabriz
Nombre Fantasía:
Tarasazeh Tabriz
País:
VENEZUELA

Comercial 1

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