Henri Falcón

Henri José Falcón Fuentes fue suboficial de las fuerzas armadas y luego estudió derecho, pero no tenía inclinaciones políticas hasta el 4 de febrero de 1992. Así lo confesó en una entrevista al diario El Impulso de Barquisimeto, su propia esposa y madre de sus cuatro hijos, Mariaelba Díaz. “Henri estuvo en el mismo salón de clases cuando Chávez estuvo en la milicia. Y al verlo en la televisión (el día del fallido golpe) se interesó, incluso lo fue a visitar a la cárcel”.

No sería el único que lo visitó en la prisión. Luis Miquilena, quien fue mentor político de Chávez desde los tiempos de Yare, fue alguien que también influenció a Falcón y a los demás integrantes del Movimiento Quinta República, MVR, plataforma que le permitió a Chávez llegar al poder. Al juramentarse, lo hizo sobre una constitución “moribunda” que sería remplazada en poco tiempo a través de una Constituyente en la cual los integrantes de MVR jugarían un papel activo.

Entre los constituyentes de MVR estaba Falcón. Hizo parte de la comisión de Modificación y Protección de la Constitución, pero su rol más importante sería como vicepresidente de la comisión de Forma de Estados, Municipios y otras Entidades Federales. «Debemos ir hacia un nuevo federalismo, un sistema más efectivo de descentralización, que dé mayor fortaleza a los municipios y abra paso al gobierno parroquial», decía en ese entonces. Años después terminaría invocando esa filosofía y apelando a la defensa de esa Constitución, cuando el mismo gobierno que la había impulsado terminaría desconociéndola al imponer un modelo centralista, que concentraba el poder en manos de Chávez.

El alcalde revolucionario

Una vez terminó el proceso constituyente, Falcón se lanzó como candidato por el MVR a la alcaldía del municipio Iribarren (Barquisimeto). Salió elegido y ya como alcalde empezó a trabajar en el fortalecimiento del poder local, no solo en su ciudad sino en el resto del país. Instaba a otros políticos a activar la Asociación Nacional de Alcaldes de Venezuela (Anave) «antes de que muera por inanición» pues  en ese momento llevaba meses sin reunirse y estaba en problemas por pujas políticas locales.

Pero al poco tiempo, Falcón, quien había sido presidente de ANAVE, terminaría montando una asociación paralela de Alcaldes Bolivarianos, integrada por 129 mandatarios municipales que se identificaban con el Movimiento Quinta República. La justificación para ello era que se necesitaba defender la constitución y al gobierno del presidente Chávez, que estaba pasando por una de sus peores crisis en 2002. «Existe una campaña orquestada y sistemática de guerra sucia por parte de un grupo minúsculo que intenta distorsionar la realidad nacional, y que tiene como único fin darle un golpe a la constitucionalidad promoviendo la salida del comandante Hugo Chávez Frías», dijo entonces.

Falcón ya no era solo una figura importante del poder local, sino que pasó a integrar el escuadrón técnico” de la dirección nacional de MVR junto a Diosdado Cabello, Oscar Navas Tortolero, Alejandro Andrade y Vielma Mora, todos militares retirados, nombrados por Chávez. Su misión era reactivar y reestructurar el partido de gobierno. Además de hacer parte de ese escuadrón, Falcón era el único alcalde, aparte de Freddy Bernal, que integraba el Comando Político Revolucionario.

Su defensa del proyecto de la revolución y del presidente llegó a tal punto que la Coordinadora Democrática de Lara introdujo una denuncia ante la Fiscalía en la que lo acusaron de agredir físicamente a la concejala Oly Mendoza, de la oposición, en un centro en donde recogían firmas para el referendo revocatorio en contra de Chávez.  Según declaró Mendoza ante los medios «(Falcón) se presentó con una patota de unos 40 motorizados oficiales, un grupo de aproximadamente 10 mujeres y otras personas con franelas rojas que decían ‘No Firmes’, tratando de intimidar a la gente para que no participara».

Pero esa defensa a ultranza se iría suavizando al poco tiempo, y los primeros síntomas de esa transformación se harían visibles con la decisión de lanzarse a un segundo periodo como alcalde. El día de la inscripción de su candidatura lució una franela azul, mientras el gobernador, su aliado político de antaño, Luis Reyes Reyes, y los demás oficialistas, vestían de rojo. Este hecho fue interpretado por la prensa local como un mensaje de que se estaba apartando del radicalismo.

En los comicios regionales, Falcón resultó electo como el alcalde con el mayor número de votos en el país. Su gestión era reconocida tanto por chavistas como por opositores que aprobaban su lema de “revolución eficiente”. Así fue construyendo un liderazgo local propio en Lara, pero seguía impulsando la instancia del poder local por todo el país. En Barquisimeto creó la primera oficina de cooperación internacional para una alcaldía de la mano de organismos internacionales, pero buscando crear una red con otras alcaldías.

Durante su gestión enfrentó problemas con los transportistas que se fueron a paro por el nuevo sistema de transporte masivo, Transbarca, en donde ellos no tendrían participación. También criticaron que no logró terminar algunas obras. Sin embargo, era más lo positivo que le reconocían los larenses que las fallas a su gestión, que empezó muy revolucionaria pero hacia el final del segundo periodo era vista como moderada.

¿Chavista light o proyecto personal?

En una entrevista con el diario El Nacional en septiembre de 2007, antes del referendo constitucional y ante los rumores que Falcón se estaba distanciando del chavismo afirmó: “Soy chavista y lo he declarado en todas partes. Creo en el Presidente y en su proyecto revolucionario. Quizás, no soy tan radical como esperan algunos, yo comparto la revolución con trabajo y eficiencia.” Incluso añadió: “De acuerdo con la voluntad del señor Presidente y del pueblo, se verá mi destino en el proceso revolucionario”.

Pero en diciembre de 2007, cuando el oficialismo perdió el referendo que buscaba profundizar el socialismo, darle más poder al Ejecutivo y diezmar el poder local, entre otros puntos, Falcón hizo la siguiente crítica. «Tenemos que pensar mucho, despojarnos de nuestra soberbia para analizar qué pasó, por qué se abstuvo un porcentaje importante de la población que apoya al presidente Chávez. Nos queda entendernos y respetarnos, las desviaciones y los radicalismos son negativos de lado y lado. Reconocemos con altura y humildad el triunfo de nuestros adversarios».

Tres meses después el presidente y el partido PSUV empezarían una purga, señalando y expulsando del partido a quienes consideraron le habían jugado doble al referendo y a quienes había que separar del proyecto de cara a las próximas elecciones regionales. En marzo de 2008, Chávez hizo uno de sus famosos programas de televisión, Aló Presidente desde Lara, en el que alertaba lo que sucedería después. Advirtió que había candidatos con ganas de lanzarse sin contar con la venia del PSUV. «Exijo paciencia, sabiduría y no caer en el juego de la oposición, en ‘candidaturitis’, ‘candidaturismo’. No hay candidatos para nada. Donde vea que se lance, pido que lo saquen. Si alguien se promueve y carga barras, voy a pedir que se le excluya. Disciplina revolucionaria. A quien no le importa el partido, que se vaya, que se lance en otro lado», dijo Chávez.

A los 15 días Falcón anunció su interés de lanzarse como candidato a la gobernación de Lara, plaza que el gobernador Reyes Reyes quería reservar para su hijo. EL PSUV anunció en un inicio que lo sacaría del partido, pero al final terminó apoyándolo y Falcón ganó las elecciones con un total de 436.755 votos, lo que equivale a 73,33 por ciento del total, lo que indica que no llega solo por el apoyo del PSUV sino también de otras fuerzas políticas y que cuenta con la simpatía de un sector opositor.

Chávez le envía un nuevo mensaje tras el triunfo. «Mándalos para el carajo, Henri, porque si no te vas a joder tú». A los pocos días el Psuv le exigió a todos los mandatarios elegidos firmar un compromiso de apoyo al gobierno socialista. Falcón no lo hizo, porque supuestamente estaba de viaje. Pero a su regreso dice que es necesario acercarse a partidos como Patria para Todos y el Partido Comunista Venezolano. El PSUV termina convirtiendo a Falcón en un objetivo hasta que éste renuncia.

A través de una carta pública a Hugo Chávez, Falcón se separa de la revolución chavista que lo inspiró a meterse en la política años atrás. En su carta le dice que lleva años buscando un espacio de diálogo con él y que lamentablemente nunca se lo concedió. En ella le reitera que es un hombre de izquierda y que eso no va a cambiar, así como su apego por la constitución pero le dice:

“La relación entre un Jefe de Estado y los gobernadores y alcaldes no puede limitarse a la emisión de instrucciones u órdenes sin la mínima oportunidad de que podamos confrontar puntos de vista, analizar los pros y los contras de determinadas iniciativas y revisar o revocar decisiones que, luego de su ejecución, resultan dañinas o inconvenientes al interés de la región o del país”, dice la carta.

Días previos al envío de la misiva, Falcón se había reunido con representantes de la empresa Polar en Barquisimeto, la cual estaba siendo amenazada de expropiación y también se había reunido con un grupo de estudiantes opositores que estaban manifestando contra el gobierno.

Falcón también califica al PSUV como una fuerza política que  “ha sido minada por la burocracia, la ausencia de discusión, el clientelismo, el grupalismo y un mal entendido concepto de lealtad”. Por eso anuncia su separación del partido y su ingreso al PPT.

El PSUV presenta otra versión de los motivos de su renuncia. Así lo expresó tras conocerse la decisión Cilia Flores, quien era la vicepresidenta del PSUV para la fecha. «Por intereses económicos traicionó el proyecto revolucionario», insinuando un trato con la empresa Polar. Ella dijo que su motivación era crear un proyecto personalista y que su inscripción en PPT era para camuflar su verdadera afiliación a la oposición venezolana, y aseguró que él se había reunido hasta con el  Movimiento 2D y Podemos.

Opositor vicepresidenciable

«No saltaré talanquera. ¿A dónde? ¿A la oposición? Ese grupo no tiene nada que ofrecerle al país y está dividido», declaró ante los medios de comunicación antes de lanzarse a la gobernación en 2008. Pero transcurridos cuatro años, en 2012, Henry Falcón se unió a la coalición de fuerzas de la oposición, nucleadas en la Mesa de la Unidad Democrática, y participó como candidato a la gobernación para ser reelegido en sus elecciones primarias.

«Hay dos caminos, no podemos escoger otro: uno de la arbitrariedad, del autoritarismo; y, por otro lado, el del consenso, del diálogo, del desarrollo, del respeto y la tolerancia», dijo luego de conocer que el presidente Hugo Chávez había designado a su ex aliado y competidor de siempre, Luis Reyes Reyes, diputado electo por Lara del PSUV.

Su victoria el 16 de diciembre de 2012 en la gobernación fue importante no solo para Falcón, y la continuidad del liderazgo que ha construido en Lara, sino también para la oposición que perdió todas las demás gobernaciones excepto la de Miranda, con Henrique Capriles, y la de Amazonas, con Liborio Guarulla. Los tres se han convertido en símbolos de bastión para la oposición venezolana. Paralelamente los tres mosqueteros se han vuelto blanco del oficialismo, que ha creado una especie de gobernaciones paralelas: Corpomiranda, Corpolara y Corpoamazonas.

Además, los tres gobernadores o sus colaboradores han sido denunciados política y judicialmente por sectores del oficialismo. En el caso de Falcón, la Comisión de Contraloría de la Asamblea Nacional le ha abierto tres expedientes por presuntas irregularidades en contratos para la realización del Top Festival de Barquisimeto, ejecución de los recursos de la recuperación de la antigua sede del canal de TV local Niños Cantores y las transferencias de recursos para el sector salud. Falcón ha acudido a sendas sesiones en el parlamento a defender su gestión y ha dicho que es una persecución política en su contra y contra quienes son cercanos a él. Uno de sus hijos también fue víctima de un extraño atentado a mano armada en Barquisimeto y el gobernador se pronunció enérgicamente diciendo que esperaba que no tuviera un móvil político.

Falcón se ha convertido en una figura clave de la actual oposición venezolana. Capriles lo designó jefe de comando de la campaña presidencial de 2013 y habría sido su fórmula vicepresidencial si hubieran ganado la contienda electoral. Sin embargo, luego de las elecciones hubo un distanciamiento entre Falcón y Capriles. Este se ha negado a reconocer a Nicolás Maduro como presidente y no ha asistido a ciertas reuniones de gobierno y a las Conferencias de Paz que el presidente Maduro convocó a partir de enero de 2014, mientras que Falcón ha mantenido una actitud más abierta y dispuesta al diálogo.

A pesar de esto el 11 de abril de ese año, la oposición y el oficialismo se sentaron en un debate cara a cara, por primera vez en años y en cadena nacional. Falcón no sólo estuvo presente en representación de la MUD (para acordar como serían las reglas del juego), sino que esa noche fue quien le recordó al chavismo que en Venezuela no todo el que sea de izquierda está del lado del oficialismo y les recordó por qué había roto con el proyecto político de Chávez en años anteriores. Luego sentenció: “Este diálogo no puede fracasar porque sería el fracaso de ustedes y el nuestro también”.

Días más tarde, el entonces secretario ejecutivo de la MUD, Ramón Guilermo Aveledo anunció al país que la alianza opositora se retiraba de las mesas de diálogos porque ninguna de sus propuestas habían sido tomadas en cuenta por el Gobierno. Siete meses más tarde, en octubre del mismo año, Falcón saldría del Consejo Federal de Gobierno, donde los tres gobernadores opositores están en clara desventaja contra los 20 del chavismo, diciendo que la reunión fue «positiva para el país». Comunicó que «expresaron lo que quisieron» sin recibir críticas y consideró que «fue una muestra de que es posible buscar espacios democráticos más allá de nuestras diferencias».

Sin embargo, no está exento de críticas. En noviembre de 2014, el diputado opositor por el estado Lara, Eduardo Gómez Sigala, criticó la labor de Falcón frente a la gobernación diciendo que «no es progresismo sino oportunismo», y agregando, además, que él había entrado en la oposicicón «pretendiendo generar fisuras». Más tarde, Falcón respondió a las críticas evitando profundizar en el tema, «no responderé a palabras necias de personas que no tienen nada que hacer».

El 27 de marzo de 2015 circuló en los medios impresos una carta pública, escrita por Falcón, donde decía al presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, que era un error considerar a Venezuela como una amenaza y que los problemas internos del país se resolverían entre los venezolanos «en el marco de nuestra constitución y del principio de autodeterminación de los pueblos».

En julio de 2015 sus pronunciamientos también coincidieron con el discurso gubernamental: «El Esequibo es nuestro», dijo en el marco de las gestiones del Gobierno nacional para la recuperación de ese territorio. El presidente Maduro agradeció su posición, y aseguró respetarlo y reconocerlo como líder de la oposición.

En enero de 2016, Falcón pasó a formar parte del Consejo Nacional de Economía Popular, iniciativa tomada por el presidente Nicolás Maduro como medida para enfrentar la crisis económica del país. El 1 de febrero, días después de haber propuesto al Ejecutivo la reversión de las expropiaciones, se retiró del consejo «hasta tanto no hayan decisiones que de alguna manera muestren voluntad no sólo de rectificar el gobierno sino que generen un ambiente de confianza frente a los serios problemas que vive el país».

El 30 de agosto de 2021, durante una entrevista en Unión Radio, Falcón abogó por superar las diferencias políticas entre sectores de la oposición y presentar candidaturas unitarias de cara a las elecciones conjuntas del 21 de noviembre de 2021. «Siempre apostaremos por el consenso, donde no haya posibilidad de los consensos, entonces exploremos otras cosas. Si las primarias por razones de tiempo no es operativo llevar adelante un proceso de primarias, vamos a las encuestas. Donde haya en disputa un estado por tres o cuatro candidatos, pues vamos a las encuestas», dijo de acuerdo con una reseña de Unión Radio.

El 2 de mayo de 2017, se pronunció con respecto a la posible activación de una Asamblea Nacional Constituyente. “Es una propuesta fraudulenta. Tenemos la mejor Constitución y un gobierno incapaz que genera hambre y miseria. La convocatoria a constituyente es un fraude a la propia Constitución para evadir los procesos electorales”, expresó.

El 14 de marzo de 2018, fue recibido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), junto a una delegación conformada por Delcy Rodríguez, entonces presidenta de la Asamblea Nacional Constituyente, y Jorge Rodríguez, ministro de Comunicación, con el objetivo de conformar una misión de observación electoral y acordar garantías para su realización. El 26 de marzo de 2018, aseguró que, de ganar los comicios presidenciales de mayo, no se juramentaría ante la ANC.

El 23 de marzo de 2022, Falcón declaró que se deslinda de Avanzada Progresista, debido a la pugna interna del partido, y tras no ser reconocido como directivo. 

El 30 de marzo de 2022, Falcón anunció la creación de “Futuro” su nuevo partido político. Bajo el lema “innovar para transformar”, el exdirigente de AP hizo la presentación oficial de la organización política, desde las instalaciones del hotel Ávila, en Caracas. 

Falcón definió a “Futuro” como un esfuerzo colectivo y un movimiento “inequívocamente opositor”. De acuerdo con una reseña de Crónica Uno, expresó que es: “Algo que la historia recordará como un acontecimiento de libertad ante las pretensiones de sometimiento, de la maldad y la mentira”.

Asimismo, dijo que el partido cuenta con representantes en 17 estados del país, y tiene como meta seguir expandiéndose.